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Letra actual de la canción
EL AMOR Y LAS PALOMAS. <br />Letra y Música: Facundo Cabral. <br />Hablado. <br />Le bastaba abrir los brazos <br />para tener la medida de la ternura <br />y el lazo que une la muerte y la vida. <br /> <br />A María. <br /> <br />Heredó, de la mañana <br />su condición de paloma, <br />y volaba muy bajito <br />para mirarse en su sombra. <br /> <br />Celebraba el cumpleaños, <br />de la luna, día a día, <br />y se bebía la noche, <br />y se bebía la vida. <br /> <br />Y se bebía los tiempos <br />y los vientos de los montes, <br />y se bebía, de un trago, <br />el silencio de los hombres. <br /> <br />María, la mía, la viva. <br /> <br />Si hubiera bebido vino, <br />en lugar del horizonte, <br />cuanto menos hubiera vivido, <br />cuanto menos hubiera soñado. <br /> <br />Cuanto menos la hubiera querido, <br />cuanto menos la hubiera extrañado, <br />a María, la mía, la viva. <br /> <br />Canto. <br />Era tanta la alegría <br />y la vida de María <br />que tenía un mundo propio <br />porque en este no cabía. <br /> <br />María, tenía. <br /> <br />Tenía una casa verde, <br />en medio de la poesía, <br />poblada de mariposas, <br />en lugar de la cocina. <br /> <br />María, tenía. <br /> <br />Ay, qué de cosas tenía, <br />y yo que no lo sabía, <br />María, la mía, la viva. <br /> <br />Tenía quinientos años, <br />de puro desprejuiciada, <br />y una existencia sin puertas <br />pero un montón de ventanas. <br /> <br />María. <br /> <br />Un día cerró los libros <br />y abrió, contenta, la vida, <br />nadie entendió su alegría <br />y ella volvió a ser hormiga. <br /> <br />María, hormiga. <br /> <br />Ay, qué de cosas tenía, <br />y yo que no lo sabía, <br />María, la mía, la viva. <br /> <br />Adónde irán las palomas, <br />cuando se sienten muy viejas, <br />o será que no envejecen <br />y pasan a ser estrellas. <br /> <br />Adónde irán las palomas, <br />cuando ya no son hermosas, <br />o al igual que las mujeres <br />se esconden por vanidosas. <br /> <br />Adónde irán las palomas, <br />que nunca me dejan penas, <br />o es que yo las continúo <br />en todas las cosas buenas. <br /> <br />Adónde ha ido María, <br />que mi alma no la llora, <br />o es que son la misma cosa <br />el amor y las palomas.
Letra nueva de la canción
EL AMOR Y LAS PALOMAS. <br />Letra y Música: Facundo Cabral. <br />Hablado. <br />Le bastaba abrir los brazos <br />para tener la medida de la ternura <br />y el lazo que une la muerte y la vida. <br /> <br />A María. <br /> <br />Heredó, de la mañana <br />su condición de paloma, <br />y volaba muy bajito <br />para mirarse en su sombra. <br /> <br />Celebraba el cumpleaños, <br />de la luna, día a día, <br />y se bebía la noche, <br />y se bebía la vida. <br /> <br />Y se bebía los tiempos <br />y los vientos de los montes, <br />y se bebía, de un trago, <br />el silencio de los hombres. <br /> <br />María, la mía, la viva. <br /> <br />Si hubiera bebido vino, <br />en lugar del horizonte, <br />cuanto menos hubiera vivido, <br />cuanto menos hubiera soñado. <br /> <br />Cuanto menos la hubiera querido, <br />cuanto menos la hubiera extrañado, <br />a María, la mía, la viva. <br /> <br />Canto. <br />Era tanta la alegría <br />y la vida de María <br />que tenía un mundo propio <br />porque en este no cabía. <br /> <br />María, tenía. <br /> <br />Tenía una casa verde, <br />en medio de la poesía, <br />poblada de mariposas, <br />en lugar de la cocina. <br /> <br />María, tenía. <br /> <br />Ay, qué de cosas tenía, <br />y yo que no lo sabía, <br />María, la mía, la viva. <br /> <br />Tenía quinientos años, <br />de puro desprejuiciada, <br />y una existencia sin puertas <br />pero un montón de ventanas. <br /> <br />María. <br /> <br />Un día cerró los libros <br />y abrió, contenta, la vida, <br />nadie entendió su alegría <br />y ella volvió a ser hormiga. <br /> <br />María, hormiga. <br /> <br />Ay, qué de cosas tenía, <br />y yo que no lo sabía, <br />María, la mía, la viva. <br /> <br />Adónde irán las palomas, <br />cuando se sienten muy viejas, <br />o será que no envejecen <br />y pasan a ser estrellas. <br /> <br />Adónde irán las palomas, <br />cuando ya no son hermosas, <br />o al igual que las mujeres <br />se esconden por vanidosas. <br /> <br />Adónde irán las palomas, <br />que nunca me dejan penas, <br />o es que yo las continúo <br />en todas las cosas buenas. <br /> <br />Adónde ha ido María, <br />que mi alma no la llora, <br />o es que son la misma cosa <br />el amor y las palomas.
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