Ingresar
Registro
Buscar en la letra
Buscar por:
#
A
B
C
D
E
F
G
H
I
J
K
L
M
N
O
P
Q
R
S
T
U
V
W
X
Y
Z
Inicio
>
O
>
Omar Cerasuolo
>
Pimpollo
> Corregir Pimpollo
Plugin Winamp
Lista de
reproducción
Corregir Letra Pimpollo de Omar Cerasuolo
Regresar a la letra Pimpollo de Omar Cerasuolo
El envío de correcciones solamente está disponible para usuarios autenticados. Debe
autenticarse
para poder realizarla.
Letra actual de la canción
Pimpollo quiero hablarte, y a solas, porque quiero <br />más que decirte cosas, mostrarme por adentro. <br />Pimpollo de mi alma yo sé que tu silencio <br />más que palabras lindas necesita un espejo, <br />si bien yo soy tu padre, y eso me da derechos, <br />sé que a tu edad no valen algunos argumentos, <br />que sobran ciertas frases, y hace falta el ejemplo, <br />por eso me conformo con que me creas sincero. <br /> <br />Claro que yo debiera ser más amigo, tengo <br />que estar más cerca tuyo de vez en cuando al menos, <br />y sobre todo ahora, Pimpollo, en este tiempo <br />en que tu sangre joven busca su derrotero, <br />y se te van los ojos al país de los sueños, <br />y se quedan tus manos para escribir recuerdos, <br />ahora que en mi alma también hay algo nuevo <br />algo que no quisiera decirte que son ?celos? <br />porque sabrás, Pimpollo que aunque no lo demuestro, <br />y aunque de la impresión de estar solo en los pesos, <br />me preocupan tus pasos y te sigo de lejos. <br /> <br />Si supieras las noches, que te pienso, y te pienso, <br />lo hablamos con tu madre, la pobre según veo <br />vive más el problema, sufre tu crecimiento <br />da vueltas con ustedes, y lleva todo el peso <br />de la casa, yo, a veces, parezco un forastero <br />y es que, yo fui educado de otra forma, otro tiempo, <br />te mentiría si te digo que no temo, <br />si al no hallar las palabras muchas veces me muerdo, <br />y me trago las ganas de contarte mis miedos, <br />porque los hombres, somos así ¡de carne y hueso! <br />Pimpollo, somos luz y sombra al mismo tiempo, <br />llevamos en nosotros algo así como un fuego, <br />una chispa sagrada, madre de tanto incendio. <br /> <br />Ustedes, las mujeres en cambio, llevan dentro <br />un manantial sagrado y es que Dios mismo ha puesto, <br />en el cántaro tibio de sus hermosos cuerpos <br />el agua de la vida, un grandioso misterio, <br />por eso es que te pido, o mejor te recuerdo, <br />la vida es un camino, tenés que recorrerlo, <br />acordarte que abundan los entretenimientos. <br />¡No juegues con la vida! ¡Cuidado con el fuego! <br /> <br />No quiero que te quedes mirando mis defectos, <br />ni quiero que me busques en los rostros ajenos, <br />tenés que preocuparte de hallar tu compañero, <br />que ya dejó a los suyos, y viene hacia tu encuentro. <br />Salí de vos, te invito a que hagas un esfuerzo, <br />larga esos colibríes que hay en tus ojos nuevos, <br />y recorre horizontes ¡andate hasta otros cielos!, <br />conoce otros paisajes, ¡si es tuyo el universo!. <br /> <br />Llénales de preguntas al río, al sol, y al viento, <br />habla con los caminos, te dirán lo que vieron, <br />son mis viejos amigos y te irán repitiendo: <br />los que buscan encuentran, no te apures que hay tiempo. <br />Y es cierto, es mi experiencia lo poquito que tengo, <br />que le gané a la vida, mira alrededor nuestro, <br />nada se hace de golpe la dicha es un secreto. <br />¡Hacer todas las cosas a su debido tiempo! <br /> <br />Ya vas a ver, Pimpollo, ¡qué hermoso es todo eso! <br />tendrás ganas de darte, y es que podrás hacerlo, <br />porque para ese entonces ya volverás sabiendo, <br />que el amor, solamente el amor, da derechos, <br />pero el amor, Pimpollo, recordalo, no es ciego, <br />tiene luz en los ojos, y te sirve de espejo, <br />te toma de las manos, y lo sentís adentro, <br />entrecerrás los ojos ¡y estás tocando el cielo! <br />Perdóname, Pimpollo, me inspiro, y me voy lejos, <br />no sé si es el cariño o estoy quedando viejo, <br />debía y no sabía como serte sincero, <br />ya ves, quise mostrarte, como estás aquí adentro, <br />y ahora que ya dije lo que padezco y siento <br />quisiera regalarte dos cosas: ¡Una!, el riesgo <br />de equivocarte la otra, una frase, un secreto: <br />Ama y ¡Haz lo que quieras, Pimpollo... Yo te quiero!
Letra nueva de la canción
Pimpollo quiero hablarte, y a solas, porque quiero <br />más que decirte cosas, mostrarme por adentro. <br />Pimpollo de mi alma yo sé que tu silencio <br />más que palabras lindas necesita un espejo, <br />si bien yo soy tu padre, y eso me da derechos, <br />sé que a tu edad no valen algunos argumentos, <br />que sobran ciertas frases, y hace falta el ejemplo, <br />por eso me conformo con que me creas sincero. <br /> <br />Claro que yo debiera ser más amigo, tengo <br />que estar más cerca tuyo de vez en cuando al menos, <br />y sobre todo ahora, Pimpollo, en este tiempo <br />en que tu sangre joven busca su derrotero, <br />y se te van los ojos al país de los sueños, <br />y se quedan tus manos para escribir recuerdos, <br />ahora que en mi alma también hay algo nuevo <br />algo que no quisiera decirte que son ?celos? <br />porque sabrás, Pimpollo que aunque no lo demuestro, <br />y aunque de la impresión de estar solo en los pesos, <br />me preocupan tus pasos y te sigo de lejos. <br /> <br />Si supieras las noches, que te pienso, y te pienso, <br />lo hablamos con tu madre, la pobre según veo <br />vive más el problema, sufre tu crecimiento <br />da vueltas con ustedes, y lleva todo el peso <br />de la casa, yo, a veces, parezco un forastero <br />y es que, yo fui educado de otra forma, otro tiempo, <br />te mentiría si te digo que no temo, <br />si al no hallar las palabras muchas veces me muerdo, <br />y me trago las ganas de contarte mis miedos, <br />porque los hombres, somos así ¡de carne y hueso! <br />Pimpollo, somos luz y sombra al mismo tiempo, <br />llevamos en nosotros algo así como un fuego, <br />una chispa sagrada, madre de tanto incendio. <br /> <br />Ustedes, las mujeres en cambio, llevan dentro <br />un manantial sagrado y es que Dios mismo ha puesto, <br />en el cántaro tibio de sus hermosos cuerpos <br />el agua de la vida, un grandioso misterio, <br />por eso es que te pido, o mejor te recuerdo, <br />la vida es un camino, tenés que recorrerlo, <br />acordarte que abundan los entretenimientos. <br />¡No juegues con la vida! ¡Cuidado con el fuego! <br /> <br />No quiero que te quedes mirando mis defectos, <br />ni quiero que me busques en los rostros ajenos, <br />tenés que preocuparte de hallar tu compañero, <br />que ya dejó a los suyos, y viene hacia tu encuentro. <br />Salí de vos, te invito a que hagas un esfuerzo, <br />larga esos colibríes que hay en tus ojos nuevos, <br />y recorre horizontes ¡andate hasta otros cielos!, <br />conoce otros paisajes, ¡si es tuyo el universo!. <br /> <br />Llénales de preguntas al río, al sol, y al viento, <br />habla con los caminos, te dirán lo que vieron, <br />son mis viejos amigos y te irán repitiendo: <br />los que buscan encuentran, no te apures que hay tiempo. <br />Y es cierto, es mi experiencia lo poquito que tengo, <br />que le gané a la vida, mira alrededor nuestro, <br />nada se hace de golpe la dicha es un secreto. <br />¡Hacer todas las cosas a su debido tiempo! <br /> <br />Ya vas a ver, Pimpollo, ¡qué hermoso es todo eso! <br />tendrás ganas de darte, y es que podrás hacerlo, <br />porque para ese entonces ya volverás sabiendo, <br />que el amor, solamente el amor, da derechos, <br />pero el amor, Pimpollo, recordalo, no es ciego, <br />tiene luz en los ojos, y te sirve de espejo, <br />te toma de las manos, y lo sentís adentro, <br />entrecerrás los ojos ¡y estás tocando el cielo! <br />Perdóname, Pimpollo, me inspiro, y me voy lejos, <br />no sé si es el cariño o estoy quedando viejo, <br />debía y no sabía como serte sincero, <br />ya ves, quise mostrarte, como estás aquí adentro, <br />y ahora que ya dije lo que padezco y siento <br />quisiera regalarte dos cosas: ¡Una!, el riesgo <br />de equivocarte la otra, una frase, un secreto: <br />Ama y ¡Haz lo que quieras, Pimpollo... Yo te quiero!
Digite lo que ve en la imagen