(Romanos 16:2)
1. Sara, Ester, María, Rut y otras
fueron modelos de fe y lealtad.
Su devoción a Dios fue lo principal.
De su historia un registro se guardó;
de otras no se dice ni su nombre,
mas también gozaron del gran amor de Dios.
2. Su fiel amor, bondad y valentía
les merecieron la aprobación de Dios.
Tales virtudes un bello adorno son.
Su ejemplo todos hemos de imitar.
Muy amadas son nuestras hermanas.
¡Que Jehová las colme de gran felicidad!
3. Madres, esposas, hijas y hermanas
que se desviven por agradar a Dios,
sigan mostrando modestia y sumisión.
Su labor jamás olvidará Jehová.
Si tú eres una fiel cristiana,
tenlo por seguro: el premio alcanzarás.
Tomado de AlbumCancionYLetra.com(Véanse también Fili. 4:3; 1 Tim. 2:9, 10; 1 Ped. 3:4, 5.)