De prisa como el viento van pasando, Los
días y las noches de la infancia, Un
ángel nos depara sus cuidados, Mientras sus
manos tejen las distancias;
Después llegan los años juveniles,
Los juegos, los amigos, el colegio, El alma ya
define sus perfiles, Y empieza el corazón
de pronto a cultivar un sueño.
[Coro:]
Y brota como un manantial, las pieles de el
primer amor, el alma ya quiere volar, y vuela tras
una ilusión, y aprendemos q el dolor y la
alegría, son las esencia permanente de la
vida.
Y luego cuando somos dos,luchando por un
ideal, Formamos un nido de amor, Refugió q
se llama hogar, Y empezamos otra etapa del
camino, Un hombre una mujer, Unidos por la fe y la
esperanza.
Los frutos de la unión que Dios bendijo,
Alegran el hogar con su presencia, A quien se
quiere mas sino a los hijos, Son la
prolongación de la existencia,
Después cuantos esfuerzos y desvelos,
Para que no les falte nunca nada, Para que cuando
crezcan lleguen lejos, Y puedan alcanzar esa
felicidad tan anhelada.
[Coro:]
Tomado de AlbumCancionYLetra.comMas luego cuando ellos se van, Algunos sin decir
adiós, El frio de la soledad, Golpea
nuestro corazón, Es por eso amor mío
que te pido, como le pido a Dios, Si llego a la
vejez, Que estés conmigo.