Lo primero que hago bonita cuando entro a clase
Es echar un vistazo a ver donde te sentaste
Y sacando cuentas elijo siempre la ubicación
Desde donde mis ojos puedan apreciar mejor todos tus detalles
Puedo pasarme la hora entera colgado mirándote
No existe un sustituto tritonal para tus caderas
Blancas y negras, corcheas y fusas se rinden a tu querer
Y todos en la clase se dieron cuenta
Como de costumbre cuando te nombran solo suspiro
Y maldigo la vez que empezamos a ser amigos
Porque no pido el cielo, yo solo quiero que seas mi sol
y no puedo sentir de cerca porque el corazón me queda chico
Puedo pasarme la hora entera colgado mirándote
No existe un sustituto tritonal para tus caderas
Blancas y negras, corcheas y fusas se rinden a tu querer
Y todos en la clase me dicen: olvídala, no tenes chancee
Y para peor tienen razón
Pero no puedo, por eso vuelo subido a la imaginación
Yo quisiera saber si en tu vida mujer hay bacante
Para un príncipe azul que destine con tan solo pensarte
Porque no pego una, vivo en la luna soy como un chico
Que no puede dormir a la noche y se escapa un ratito
A cualquier parte
Camino sin rumbo desnudo solo perdido buscándote
No encuentro un sustituto tritonal para tus caderas
Las luces y el humos, las hojas y el viento se rinden a tu querer
Y todos en la calle me dicen: olvídala, no tenes chancee
Y para peor tienen razón
Pero no puedo, por eso vuelo subido a la imaginación
Mis amigos dicen: no te enamores y fuma menos
Porque cuelgo hablando de vos cada vez que podemos
Mi psicóloga apunta que vaya despacio, que trace objetivos
Desde luego que no le hago caso, por eso te escribo quinientos versos.
Tomado de AlbumCancionYLetra.comPodría pasarme la vida entera cosita cuidándote
No quiero un sustituto tritonal pa' tus caderas
Miedos angustias, razones y dudas se rinden a tu querer
Pero todos mis amigos me dicen: olvídala, no tenes chance
Y para peor tienen razón
Pero no puedo, por eso vuelo subido a la imaginación
No te enamores y fuma menos, me dicen y tienen razón
Y aunque lo intento siempre te encuentro subida en mi imaginación