Las calles de nuestros barrios nunca toman prisioneros,
quiebran al que no resiste sea local o sea extranjero.
Ahí la paciencia no existe con los que son majaderos,
cada víctima es culpable si cayó por traicionero.
Que pasó con esos guapos que alardeaban con su vida.
Terminaron deshonrando el honor de nuestra esquina.
Ni siquiera el sobrenombre sobrevive en la avenida,
Le quitaron los colmillos, el collar y la leontina.
Son páginas estas calles que se encogen con los años,
Escritas en un idioma que no entienden los extraños.
Nacimos de muchas madres pero aquí solo hay hermanos,
En mi calle la vida y la muerte bailan con la cerveza en la mano.
Tomado de AlbumCancionYLetra.comSoy de aquí de los que sobrevivieron.