Y me corte la cabeza con un dedal.
Salieron velas, luces y luces más.
También San Nicolás, Melchor, Gaspar y Baltasar.
El dolor poco a poco a avanzar
hasta llegar a olvidar.
San Nicolás, jamás volvera,
ni el weble,
mucho menos, Melchor, Gaspar y Baltasar.
Ahora creo que he perdido mis brujas,
mis monstruos y hasta el coco.
Me duele aún más porque al final
también los tendre que olvidar.
San Nicolás, jamás volvera,
ni el weble,
mucho menos, Melchor, Gaspar y Baltasar.
Mis sueño y esperanzas se irán,
Luke y Yoda se romperán,
las canicas ya no me divertirán,
y todos ellos me perderán.
San Nicolás, jamás volvera,
ni el weble,
mucho menos, la máquina de sueños: mamá y papá,
mamá y papá...mamá y papá.