Cielo arriba,
suelo abajo,
pan de trigo,
luz de neón.
Yo aquí vivo,
QUINTO PISO,
no consigo
sonreir.
Y la tele es un revólver,
y el vecino es un caníbal
como yo.
Y hay tanta gente por la calle,
disimulando la amargura,
hay tantos lunes que los viernes,
están armando un sindicato.
Para acudir a la fortuna,
te venden dioses novedosos,
para encontrarse la ternura,
hay quien se manda una pastilla.
Y este septiembre tan enero...
Y esta sonrisa tan llorona...
Tanto cielo,
tanta luz,
¿Quién me observa desde allí?
Tantos ríos,
tanta sed,
tanta prisa por llegar.
Y el fútbol de los domingos,
y el café que abre unos ojos
que no ven.
Y hay tanto espacio en el espacio,
y hay tanta duda en las escuelas,
los mercenarios al Congreso
y otro estratega es emboscado.
Para acudir a la fortuna,
te venden dioses novedosos,
para encontrarse la ternura,
hay quien se manda una pastilla.
Y este septiembre tan enero...
Y esta sonrisa tan llorona...
Cielo arriba,
suelo abajo,
Tomado de AlbumCancionYLetra.compan de trigo, luz de neón.