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Y si llueve saldremos a la lluvia
a lavar las vidas que van acumulando mugre
de palo de gallinero.
Tanta mentira, tanto fingir, tanto desastre...
Desnudos sobre el mascarón de proa
lamiendo con la punta de la lengua
el tinte que desprende la máscara.
Si arrecia el viento norte abajo telas,
calzarse botas y esgrimir las hachas.
Sobre la superficie caminamos;
que sobre la superficie nos salvamos.
No sólo pueden ellos. Y mejor si no hay motores.
Tenemos velas.
No sólo pueden ellos. Y mejor si no hay motores.
Tenemos velas.
Bajo nosotros, los huesos y las piedras
que son los sedimentos de nuestra incierta gloria.
Y si llueve saldremos a la lluvia
a vacíar el semillero de sonrisas
y esperar cosecha.En la silla de parar las prisas.
Tanto correr, tanto asentir, tanto quemarse...
El viento te traerá nuevos encuentros,
amores nuevos y una vida dulce,
más plena cuanto menos soberbia.
Si arrecia el viento norte abajo velas.
Calzarse botas y enarbolar hachas.
Sobre la superficie nos salvamos
desde lo más profundo; respirando.
No sólo pueden ellos.Y mejor si no hay motores.
Tenemos velas.
Bajo nosotros, los huesos y las piedras
que son los sedimentos de nuestra incierta gloria.
Bajo nosotros, tejidos los momentos
que manan de la calma.Lo único que cuenta.
No sólo pueden ellos. Y mejor si no hay motores.
Tenemos velas.
No sólo pueden ellos. Y mejor si no hay motores.
Tenemos velas.
Bajo nosotros, las huellas y las piedras
serán el rudimento de nuestra incierta gloria.
Bajo nosotros, tejidos los momentos
que manan de la calma.Lo único que cuenta.