Otra vez,
pensando en ti toda la noche
y no duermo,
no me canse de repetir
cuanto te quiero,
me quede sin cigarrillos
y los nervios
hacen que yo
me levante de paseo,
hablando conmigo
a solas y en silencio.
Y te vi,
te acercaste a saludarme
que es lo menos,
yo fingí ser feliz pero
ante Dios que no era cierto,
y trate de ocultar la emoción
de mi mirada,
pero el corazón que manda me decía,
y al final me delataron
estas palabras.
Ya vez como hasta aquí
yo he sobrevivido,
no se que rayos me dio tu cariño,
pero es que alguno
tenia que perder.
Ya vez mientras me encuentres
mas lejos que antes,
debo admitir
que no podré olvidarte,
no digas nada mejor cállate.
La invite a tomar café
en el bar en la otra esquina,
acepto pero dijo
poco tiempo tengo prisa,
contemple que aunque
había pasado el tiempo era la misma,
intente tomar su mano,
y no podía,
y en un abrazo
como amigo se despedía.
Se fue y me quede
tan solo en esta silla,
entre la gente vi que se perdía,
y ya no se si algún día la veré.