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Falsos profetas te engañan por TV,
convierten el amor en dinero,
solo te dicen lo que quieres escuchar,
juegan con tus sentimientos.
Como lobos entre ovejas,
están listos para atacar.
Manipulan la verdad
en busca de su bienestar.
Fieles hermanos dan su vida por amor,
solo algunos pocos lo entendieron,
que a pesar del rechazo de su propia creación,
Dios no es un juego, es verdadero.
Sin dudarlo un segundo,
por amor, Él se entregó.
Y al fin conocerlo
fue infinito su amor,
que por su sangre derramada
tus pecados Él pagó,
infinita y sublime
fue la muestra de su amor.