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Siempre te estaré esperando
en las puertas del amor.
Ponte tu vestido blanco
deja abierto el corazón.
Pequeño diablo
mi principio y final
mi sol nocturno
mi planeta personal.
Te quiero
te quiero
te quiero
y no quiero nada más.
Esta lluvia de verano
que es tormenta si te vas
acaricia mis recuerdos
como flechas de placer.