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Ven, enseñame
que el cielo es más pequeño que tu corazón
que tus manos me acaricien
cuando estemos solos en tu habitación,
así...
tu tienes ese cuerpo de escultura
que a cualquiera nos incita
nos facina
cuando mueves tus caderas
y con esa mirada ardiente que hipnotiza
cuando estamos frente a frente
y no hay manera
de que tu y yo
podamos parar
ven enseñame
que el cielo es más pequeño que tu corazón
y tus labios se deslicen sin pudor
quiero navegarte
y encenderme con tu canto de sirena
y arrastrarme hasta tu fosa
y sumergirme en tus piernas
y en tus ojos que hipnotizan
cuando estamos frente a frente
y no hay manera de que
de que tu y yo
podamos parar