Yo solo quiero mirarte a los ojos, que tu alegría lleve el timón
Quitarle a tu mirada ese horizonte de escombros, prescindir de una vida sin tu olor
Yo solo quiero verte subida cada mañana a un unicornio azul en mi colchón
Y que no se disocien nunca tu cuerpo y mi cama y ser el portavoz de nuestra revolución
Yo solo quiero el tic-tac de tu pecho para dar percusión a esta canción
Que la saliva sea el punto de encuentro y que el jurado de tu sangre falle a mi favor
Yo solo quiero la banda sonora de tu alma para que escuchen en cada rincón
Que mis caricias no se tiren más por la ventana al ver que tu espalda no apareció
Y que el corazón pueda cumplir su oficio y ser tan imprudente como exija el amor
Que lo único que quiero a estas horas es poner besos en cada paralelo y meridiano de tu cuerpo
Así que déjame creer que aun me quedan mil maneras de amarte coordinando mi oleaje y tus caderas
Que lo único que quiero a estas horas es que tus besos emigren todos a los afluentes de mi cuerpo
Así que déjame creer que aun nos quedan primaveras y metamos este otoño en una caja de madera
Yo solo quiero darte carnavales, que tu disfraz sea tu ropa interior
Y ofrecerte un catálogo de besos en lugares donde tan solo alcanza el corazón
Yo solo quiero empezar contigo un curso intensivo de quitarnos la ropa y el dolor
Y que cada noche nos expliquemos los motivos de no exigir ninguna explicación
Yo solo quiero un sobresaliente en las asignaturas de tu piel
Y darle un listado de razones a la gente que expongan que quererse es un deber
Yo solo quiero hacerle una bufanda a tu alma perderme entre tu falda y tu jersey
Irte a buscar cuando salgas de clase y mañana tomar tu pulso sin tocar tu piel
Y que el corazón pueda cumplir su oficio y ser tan imprudente como exija el amor
Tomado de AlbumCancionYLetra.com
Que lo único que quiero a estas horas es poner besos en cada paralelo y meridiano de tu cuerpo
Así que déjame creer que aun me quedan mil maneras de amarte coordinando mi oleaje y tus caderas
Que lo único que quiero a estas horas es que tus besos emigren todos a los afluentes de mi cuerpo
Así que déjame creer que aun nos quedan primaveras y metamos este otoño en una caja de madera