Nacido en Sonora tierra mexicana
Cantara mi voz latinoamericana,
Pues del Rió Bravo hasta la Patagonia,
Nos une la raza, nos une la sangre, nos une la gloria.
En estos momentos de fieros combates,
Que han organizado esos gringos orates,
Yo llamo a las armas para liberarnos,
Para sacudirnos esa plaga inmunda de Yankies magnates.
Se roban la fruta y nuestro petróleo,
Desde un kilo de oro a una simple banana,
Ya nomás nos falta queridos hermanos,
Que nos asesinen y que también nos violen a nuestras hermanas.
Si Bolívar viera nuestra cobardía,
De pesar quizás otra vez moriría,
Si Miguel Hidalgo se resucitara,
De castrados hombres y de muy cobardes nos acusaría.
Tomemos las armas sin miedo ninguno,
Tomemos de ejemplo al Pueblo Cubano,
Que mas inspirado y con Castro de guía,
Rompió las cadenas, se lleno de gloria, venciendo al tirano.
Si la sangre corre será necesario,
¡Adelante Siempre! revolucionario,
Que para salvar el honor de los pueblos,
No bastan promesas, ni los crucifijos, menos los rosarios.
Obreros, empleados, ¡arriba estudiantes!,
Con los campesinos cantemos victoria,
Ya se acabaran esas castas sociales,
Y no habrá fronteras desde el Rió Bravo, hasta la Patagonia.
Tomado de AlbumCancionYLetra.com
Y no habrá fronteras desde el Rió Bravo, hasta la Patagonia.