Idioma Origen:
El taller del orfebre
Guillermo Dávila
En una calle de la ciudad,
en medio de la ciudad
está el taller del orfebre.
En su balanza pesa metal,
y siempre puede juzgar
la talla del corazón.
Es una autoridad en amor,
y en sentimientos.
Descubre los secretos que tú,
y nadie mas que tú
escondes dentro del alma.
Es un experto en felicidad,
sabe tasar el dolor,
conoce la verdad.
Y cada noche encuentra la luz,
de alguna estrella.
Hay un sueño que no acaba jamás
que despierta junto a tí al despertar
que te lleva donde quieres llegar
si tú lo quieres.
Hay amor por donde quiera que vas
donde menos se pudiera esperar
hay amor cuando terminas de amar
que nunca muere.
En una calle de la ciudad,
en medio de la ciudad
está el taller del orfebre.
En su balanza pesa metal,
y siempre puede juzgar,
la talla del corazón.
Es una autoridad en amor,
y en sentimientos.
Hay un sueño que no acaba jamás
que despierta junto a tí al despertar
que te lleva donde quieres llegar
si tú lo quieres.
Hay amor por donde quiera que vas
donde menos se pudiera esperar
hay amor cuando terminas de amar
que nunca muere.
Si puedes, si quieres,
lo puedes encontrar en tí, en mí, en los demás.
Hay un sueño que no acaba jamás
que despierta junto a tí al despertar
que te lleva donde quieres llegar
si tú lo quieres.
Hay amor por donde quiera que vas
donde menos se pudiera esperar
hay amor cuando terminas de amar
que nunca muere.
Letra enviada por SarAlexRipper (2005/01/15)
Idioma Destino:
El taller del orfebre
Guillermo Dávila
En una calle de la ciudad,
en medio de la ciudad
está el taller del orfebre.
En su balanza pesa metal,
y siempre puede juzgar
la talla del corazón.
Es una autoridad en amor,
y en sentimientos.
Descubre los secretos que tú,
y nadie mas que tú
escondes dentro del alma.
Es un experto en felicidad,
sabe tasar el dolor,
conoce la verdad.
Y cada noche encuentra la luz,
de alguna estrella.
Hay un sueño que no acaba jamás
que despierta junto a tí al despertar
que te lleva donde quieres llegar
si tú lo quieres.
Hay amor por donde quiera que vas
donde menos se pudiera esperar
hay amor cuando terminas de amar
que nunca muere.
En una calle de la ciudad,
en medio de la ciudad
está el taller del orfebre.
En su balanza pesa metal,
y siempre puede juzgar,
la talla del corazón.
Es una autoridad en amor,
y en sentimientos.
Hay un sueño que no acaba jamás
que despierta junto a tí al despertar
que te lleva donde quieres llegar
si tú lo quieres.
Hay amor por donde quiera que vas
donde menos se pudiera esperar
hay amor cuando terminas de amar
que nunca muere.
Si puedes, si quieres,
lo puedes encontrar en tí, en mí, en los demás.
Hay un sueño que no acaba jamás
que despierta junto a tí al despertar
que te lleva donde quieres llegar
si tú lo quieres.
Hay amor por donde quiera que vas
donde menos se pudiera esperar
hay amor cuando terminas de amar
que nunca muere.
Letra enviada por SarAlexRipper (2005/01/15)