Idioma Origen:
Letra y música: Luiz Carlos Borges
Yo, por la noche negra de tus cabellos,
tú, encendiendo estrellas para alumbrar.
Yo, a buscar la llave de tus secretos,
tú, ocultando el rastro de tu mirar.
A que rincón la vida llevó tus pasos
flor de Misiones que me ha mandado Diós.
Como entender que un día, estando en mis brazos,
con luz de sol me sonrió,
y dijo adiós con un río
en la voz.
Y es ese amor que me tiene así
peregrino en busca de tu querer,
y en el rocío lloró por ti
un clavel del aire al amanecer.
Linda misionera con voz de río,
flor que en la frontera de la pasión
me entibió la boca y dejó este frío
que anidó por siempre en mi corazón.
Por donde andarás, por donde andaré,
donde está el amor que juré por ti?
Quién te amará como yo te amé,
lejos de tu amor, como iré a vivir?
Sangra del barrancal tierra colorada,
arde en la sal del rostro el sol que se va,
yo, caminante triste por las quebradas,
solo a seguir mi rumbo de soledad.
Loco por no olvidar tu mirar salvaje,
ciego al ver que tu imagen ya no es verdad,
sin comprender que cruzas por el paisaje
cual flor del camalotal,
que es linda, pero de nadie será.
Idioma Destino:
Letra y música: Luiz Carlos Borges
Yo, por la noche negra de tus cabellos,
tú, encendiendo estrellas para alumbrar.
Yo, a buscar la llave de tus secretos,
tú, ocultando el rastro de tu mirar.
A que rincón la vida llevó tus pasos
flor de Misiones que me ha mandado Diós.
Como entender que un día, estando en mis brazos,
con luz de sol me sonrió,
y dijo adiós con un río
en la voz.
Y es ese amor que me tiene así
peregrino en busca de tu querer,
y en el rocío lloró por ti
un clavel del aire al amanecer.
Linda misionera con voz de río,
flor que en la frontera de la pasión
me entibió la boca y dejó este frío
que anidó por siempre en mi corazón.
Por donde andarás, por donde andaré,
donde está el amor que juré por ti?
Quién te amará como yo te amé,
lejos de tu amor, como iré a vivir?
Sangra del barrancal tierra colorada,
arde en la sal del rostro el sol que se va,
yo, caminante triste por las quebradas,
solo a seguir mi rumbo de soledad.
Loco por no olvidar tu mirar salvaje,
ciego al ver que tu imagen ya no es verdad,
sin comprender que cruzas por el paisaje
cual flor del camalotal,
que es linda, pero de nadie será.