Idioma Origen:
Me suponía que tu y yo,
seriamos siempre felices
el plan era sanar heridas
aunque quedaran cicatrices.
Tal vez yo comentí el error,
pero no me arrepiento
te di todo mi amor, te hice mi dios
no me detuvo el pensamiento.
Y hoy me da tristeza saber,
que perdí la batalla otra vez.
Coro
Que lastima
que no sientas lo mismo por mi
que lastima
hoy que solo vivia para ti.
Tu me dices tan tranquila
esta es la despedida
y no, no te quiero mentir.
Que lastima,
pues porque embargué el corazón
que lastima
y olvidé hasta en nombre de Dios.
Esto no me lo esparaba,
creo que sobran las palabras
y me duele saber
que ya no me amas.
Tal vez yo comentí el error,
pero no me arrepiento
te di todo mi amor, te hice mi dios
no me detuvo el pensamiento.
Y hoy me da tristeza saber,
que perdí la batalla otra vez.
Coro
Que lastima
que no sientas lo mismo por mi
que lastima
hoy que solo vivia para ti.
Tu me dices tan tranquila
esta es la despedida
y no, no te quiero mentir.
Que lastima,
pues porque embargué el corazón
que lastima
y olvidé hasta en nombre de Dios.
Esto no me lo esparaba,
creo que sobran las palabras
y me duele saber
que ya no me amas.
Idioma Destino:
Me suponía que tu y yo,
seriamos siempre felices
el plan era sanar heridas
aunque quedaran cicatrices.
Tal vez yo comentí el error,
pero no me arrepiento
te di todo mi amor, te hice mi dios
no me detuvo el pensamiento.
Y hoy me da tristeza saber,
que perdí la batalla otra vez.
Coro
Que lastima
que no sientas lo mismo por mi
que lastima
hoy que solo vivia para ti.
Tu me dices tan tranquila
esta es la despedida
y no, no te quiero mentir.
Que lastima,
pues porque embargué el corazón
que lastima
y olvidé hasta en nombre de Dios.
Esto no me lo esparaba,
creo que sobran las palabras
y me duele saber
que ya no me amas.
Tal vez yo comentí el error,
pero no me arrepiento
te di todo mi amor, te hice mi dios
no me detuvo el pensamiento.
Y hoy me da tristeza saber,
que perdí la batalla otra vez.
Coro
Que lastima
que no sientas lo mismo por mi
que lastima
hoy que solo vivia para ti.
Tu me dices tan tranquila
esta es la despedida
y no, no te quiero mentir.
Que lastima,
pues porque embargué el corazón
que lastima
y olvidé hasta en nombre de Dios.
Esto no me lo esparaba,
creo que sobran las palabras
y me duele saber
que ya no me amas.