Idioma Origen:
Quién eres tú, amiga mía? no comprendo,
algo se rompe y no lo acabo de entender,
vienes a mí como buscando tu refugio, y
luego te marchas como quien pierde su tren.
No es mi costumbre darle vueltas a la nada
¿de qué nos sirve esta loca intimidad?
si al fin de cuentas, nos quedamos tan vacíos
como esta cama que acabamos de dejar.
¿Porqué jugarnos el placer en unas horas?
¿Porqué cambiarle el color a la ilusión?
Vamos a darle tiempo al tiempo, amiga mía,
después hablamos de las cosas del amor.
Soy un fracaso como amante, lo comprendo,
un poco lento, un poco esquivo, un poco yo,
me gusta el vuelo seductor de las miradas
rozando el alma, cuando sé que hay algo más.
Ése algo más que me despierta en las mañanas,
que me hace andar las manecillas del reloj,
medio poeta, embaucador, marinero,
un barco errante que navega en alta mar.
No robaré de tí otra cosa que un momento
el de tus ojos, cuando te dije que no,
como dos gotas de lluvia en mi tristeza
de embarcadero, donde nadie va a zarpar.
¿Porqué jugarnos el placer en unas horas?
¿Porqué cambiarle el color a la ilusión?
Vamos a darle tiempo al tiempo, amiga mía,
después hablamos de las cosas del amor.
¿Quién eres tu, amiga mía? no comprendo,
yo no sé de estos amores, es mejor dejarlo así,
yo no sé de estos amores, es mejor dejarlo así,
yo no sé de estos amores, es mejor dejarlo así...
Idioma Destino:
Quién eres tú, amiga mía? no comprendo,
algo se rompe y no lo acabo de entender,
vienes a mí como buscando tu refugio, y
luego te marchas como quien pierde su tren.
No es mi costumbre darle vueltas a la nada
¿de qué nos sirve esta loca intimidad?
si al fin de cuentas, nos quedamos tan vacíos
como esta cama que acabamos de dejar.
¿Porqué jugarnos el placer en unas horas?
¿Porqué cambiarle el color a la ilusión?
Vamos a darle tiempo al tiempo, amiga mía,
después hablamos de las cosas del amor.
Soy un fracaso como amante, lo comprendo,
un poco lento, un poco esquivo, un poco yo,
me gusta el vuelo seductor de las miradas
rozando el alma, cuando sé que hay algo más.
Ése algo más que me despierta en las mañanas,
que me hace andar las manecillas del reloj,
medio poeta, embaucador, marinero,
un barco errante que navega en alta mar.
No robaré de tí otra cosa que un momento
el de tus ojos, cuando te dije que no,
como dos gotas de lluvia en mi tristeza
de embarcadero, donde nadie va a zarpar.
¿Porqué jugarnos el placer en unas horas?
¿Porqué cambiarle el color a la ilusión?
Vamos a darle tiempo al tiempo, amiga mía,
después hablamos de las cosas del amor.
¿Quién eres tu, amiga mía? no comprendo,
yo no sé de estos amores, es mejor dejarlo así,
yo no sé de estos amores, es mejor dejarlo así,
yo no sé de estos amores, es mejor dejarlo así...