Idioma Origen:
Me encuentro tus desaires por la escalera, me encuentro tu mirada, amor, en mi conciencia ahora sé que no eres mía, no serás mía, aunque me duela...
Me encuentro tus desaires por la azotea, camino por las calles, amor, junto a tu ausencia, con lo que yo te quería, aún te quería, y cierras las puertas...
Y aquí estaré, ansioso de deseo, cansado y malherido, y huyendo del fantasma de tu olvido... Y aquí estaré, negando que te has ido, guardando los anhelos, calmando mi dolor con sorbitos de vino...
Me encuentro tus desaires en mis quimeras, me encuentro tu presencia entre sueños de hierba, pido a Dios que haya un destino con dos caminos, que al fin se encuentran...
Y aquí estaré, ansioso de deseo, cansado y malherido, y huyendo del fantasma de tu olvido... Y aquí estaré, negando que te has ido, guardando los anhelos, calmando mi dolor con sorbitos de vino...
Me equivoqué creyendo que eras tú el sentimiento puro del querer, me equivoqué creyendo que eras tú, y ahora te canto para no volver...
Y aquí estaré, ansioso de deseo, cansado y malherido, y huyendo del fantasma de tu olvido... Y aquí estaré, negando que te has ido, guardando los anhelos, calmando mi dolor con sorbitos de vino...
Idioma Destino:
Me encuentro tus desaires por la escalera, me encuentro tu mirada, amor, en mi conciencia ahora sé que no eres mía, no serás mía, aunque me duela...
Me encuentro tus desaires por la azotea, camino por las calles, amor, junto a tu ausencia, con lo que yo te quería, aún te quería, y cierras las puertas...
Y aquí estaré, ansioso de deseo, cansado y malherido, y huyendo del fantasma de tu olvido... Y aquí estaré, negando que te has ido, guardando los anhelos, calmando mi dolor con sorbitos de vino...
Me encuentro tus desaires en mis quimeras, me encuentro tu presencia entre sueños de hierba, pido a Dios que haya un destino con dos caminos, que al fin se encuentran...
Y aquí estaré, ansioso de deseo, cansado y malherido, y huyendo del fantasma de tu olvido... Y aquí estaré, negando que te has ido, guardando los anhelos, calmando mi dolor con sorbitos de vino...
Me equivoqué creyendo que eras tú el sentimiento puro del querer, me equivoqué creyendo que eras tú, y ahora te canto para no volver...
Y aquí estaré, ansioso de deseo, cansado y malherido, y huyendo del fantasma de tu olvido... Y aquí estaré, negando que te has ido, guardando los anhelos, calmando mi dolor con sorbitos de vino...