Idioma Origen:
Vencidos hoy por nuestra inmadurez, por nuestra juventud y nuestras ansias de saber. No volverán las tardes en aquel café. Queríamos ser tan diferentes a los demás...
Supongo que el presagio de los viejos se cumplió,
y sin saber por qué, el tiempo con nosotros acabó.
Vencidos hoy por no saber reconocer a veces qué es mejor, pues el orgullo es como es. Ya se acabó, no hay más asuntos que desmentir. El barrio se apagó,
pues nunca más nos oirá reír.
Nuestra amistad, papel envejecido que el tiempo quemó, se olvidará, pues el viento sus cenizas esparció.
Y me inquieto siempre a base de pensar que por más vueltas que le dé en la vida, nada nunca será igual.
Y que la flor de nuestros años de amistad se marchitó, y aunque jamás volvió a brotar, yo echo de menos nuestras risas que aún a veces logro recordar.
Busco la forma de poder reconquistar sólo un viejo momento en nuestras vidas que nos haga despertar.
Algún instante que poder recuperar, sólo un segundo donde estemos juntos, que nos lleve a otro final. Que echo de menos nuestras risas que aún a veces logro recordar.
Idioma Destino:
Vencidos hoy por nuestra inmadurez, por nuestra juventud y nuestras ansias de saber. No volverán las tardes en aquel café. Queríamos ser tan diferentes a los demás...
Supongo que el presagio de los viejos se cumplió,
y sin saber por qué, el tiempo con nosotros acabó.
Vencidos hoy por no saber reconocer a veces qué es mejor, pues el orgullo es como es. Ya se acabó, no hay más asuntos que desmentir. El barrio se apagó,
pues nunca más nos oirá reír.
Nuestra amistad, papel envejecido que el tiempo quemó, se olvidará, pues el viento sus cenizas esparció.
Y me inquieto siempre a base de pensar que por más vueltas que le dé en la vida, nada nunca será igual.
Y que la flor de nuestros años de amistad se marchitó, y aunque jamás volvió a brotar, yo echo de menos nuestras risas que aún a veces logro recordar.
Busco la forma de poder reconquistar sólo un viejo momento en nuestras vidas que nos haga despertar.
Algún instante que poder recuperar, sólo un segundo donde estemos juntos, que nos lleve a otro final. Que echo de menos nuestras risas que aún a veces logro recordar.